Después de dos años sin que el MEC hiciera públicas sus líneas estratégicas en cuanto a la formación permanente del profesorado, pensamos que nos tenían diseñadas, nos encontramos con una desagradable sorpresa: la Subdirección General de Formación del Profesorado ha encargado a una empresa privada la detección de las necesidades de formación de todo el profesorado del MEC. Este encargo supone un giro de 180º sobre lo que se venía haciendo hasta ahora, así como un desprecio a los profesionales de la enseñanza que trabajan en formación del profesorado tanto desde los Centros de Profesores y Recursos (CPRs), como de la propia Subdirección. Hasta ahora cada CPR, partiendo de unas directrices generales emanadas del Plan Provincial de Formación de cada Dirección Provincial, realizaba la detección de necesidades del profesorado de su zona de influencia, y, tras esta detección, se realizaba la propuesta de seminarios, jornadas y cursos a impartir en su zona, actividades que eran aprobadas por cada una de las Comisiones Provinciales de Formación. Las autoridades educativas, tras su llegada al gobierno hace ahora dos años, desmantelaron, como ya denunció la Confederación de STES, la red de formación dejando prácticamente al 50% los efectivos humanos en los CPRs. La formación quedó, ante la falta de directrices del MEC, a espensas de la voluntad de cada Centro de Profesores. El estudio que se acaba de poner en marcha se denomina "Detección de Necesidades de Formación del Profesorado" y es el paso inicial del proceso de elaboración del Plan Anual de Formación 1.998-99, fue presentado a los Directores de los CPRs en una reunión de trabajo, en las que prácticamente no se les dejó hablar ni hacer aportaciones de mejora, más bien "recibieron instrucciones".  El cuestionario para la detección de necesidades de formación, que se ha llevado a los Centros desde cada CPR, tiene que ser cumplimentado individualmente por el profesorado y tabulado en cada Centro de Profesores; la empresa privada está utilizando como mano de obra para realizar el trabajo de campo al funcionariado que trabaja como Asesor de Formación en los distintos CPRs. El estudio, desde el punto de vista de STES y de distintos asesores de formación de CPRs tiene escasa validez científica, pues las encuestas parten de unos planteamientos muy generales, son iguales para todo el profesorado independientemente de la etapa educativa en la que trabajen, son anónimas y ni tan siquiera se especifica el Centro de procedencia. La tabulación del estudio, si este fuera contestado mayoritariamente por el profesorado, será imposible de realizar, pues no se han facilitado los programas informáticos para realizarlo. La Confederación de STEs considera absolutamente improcedente por ilegal la actitud de la Subdirección G. de Formación del Profesorado por no haber consultado a las organizaciones representativas del profesorado a través de la Mesa Sectorial de Educación, tal y como manda la legislación vigente. Por otra parte, los STEs denunciamos que las Comunidades Autónomas no han sido consultadas, aunque en teoría gestionarán la educación, y también la formación del profesorado, desde el 1 de Julio. Esto quiere decir que la Subdirección G. de Formación del Profesorado, tras dos años de silencio, está planificando una formación, que no gestionará, sin dar participación a las instancias autonómicas que la tendrán que gestionar.  La Confederación de STEs ha pedido a la Secretaría General de Educación, de quien depende la Subdirección G. de Formación del Profesorado, que paralice el estudio hasta que la Mesa Sectorial de Educación conozca los planes que tiene el MEC para la formación del profesorado y analice el citado estudio como parte de los mismos. Hasta que el MEC no convoque una Mesa Sectorial para tratar este tema, la Confederación de STEs pedirá al profesorado que no conteste las encuestas citadas.

Madrid, 30 de Marzo de 1.998
Fdo.: Augusto Serrano, del Secretariado de STEs